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La Presencia Dominicana en Puerto Rico - 1791-1850
(Incluye registro de emigrantes)

Precio: $28.00 (+ $6.45 envío)

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Dra. Raquel Rosario Rivera
P.O. Box 194544
San Juan, PR 00919-4544

 

 

El siglo XIX se inició con una llegada  constante de emigrados procedentes de distintos focos revolucionarios. La vecina colonia de Haiti fue la primera que incendió la chispa de la revolución en América y provocó la salida de gentes que querían salvar sus vidas de cualquier manera. Haití inició una lucha por hacer cumplir las ideas  libertarias promovidas por Vicente Ogé, joven mulato que luchaba por los derechos de los negros. Los sucesos trajeron un derramamiento de sangre que fue imparable. Estos sucesos fueron extendiéndose hasta la vecina colonia española de Santo Domingo provocando las salidas de muchas gentes. Las migraciones se iniciaron tan temprano como el 1792. El territorio español fue lugar para escapar de la guerra. Desde allí saldrían a refugiarse en lugares inmediatas como  Puerto Rico,  Cuba, Venezuela y otras islas Caribeñas.

Puerto Rico los recibió y le dio ayuda, pues muchas de esas familias llegaron sólo con la ropa que tenían puesta. Muchos llegaron de forma legal y otros de forma ilegal  por lo que las Autoridades Españolas tomaron medidas para evitar la expansión de las ideas revolucionarias y pusieron restricciones a la emigración procedente de esa isla.

Llegaron familias completas de todas razas en vías de establecerse temporeramente, pero los sucesos en La Española tardarían décadas en resolverse. Desde Puerto Rico salieron grupos para liberar a Santo Domingo español del dominio francés encabezados por Juan Sánchez Ramírez. También el Gobierno apoyó con armas y víveres a las fuerzas militares de Santo Domingo, para evitar la expansión de los sucesos revolucionarios. La entrada de Toussaint Louverture, de Jean Pierre Boyer y de Charles Herard  para hacer cumplir el Tratado de Basilea y extender el poder francés a toda la isla, hicieron de Santo Domingo español un lugar muy inestable e inseguro para vivir.   Este trabajo descubre las vicisitudes que tuvieron que pasar esos emigrados y las razones para establecerse en Puerto Rico. Su presencia no sería corta y muchos tuvieron que quedarse a vivir por largo tiempo. Presentamos esta historia que esta  fortalecida por un Registro de todos los emigrados dominicanos que se establecieron en la Isla y otro de los que no eran dominicanos pero que utilizaron el territorio para escapar de los terribles males de la guerra.


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